CNDH determinó que José Eduardo Ravelo sí sufrió tortura y abuso

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) comunicó que con motivo de las investigaciones realizadas tras la muerte del joven José Eduardo Ravelo se contó con elementos suficientes para acreditar que hubo violaciones graves a derechos humanos.

El organismo recomendó que la Fiscalía General de la República (FGR) debe de continuar con la investigación a efecto de que sea la autoridad competente la que determine bajo sentencia la pena correspondiente de los responsables.

La CNDH emitió una serie de recomendaciones al fiscal general de Justicia del estado de Yucatán, Juan Manuel León León, y al presidente municipal de Mérida, Renán Alberto Barrera Concha.

Al fiscal se le solicitó continuar con la investigación de homicidio y probable abuso sexual en contra de José Eduardo Ravelo para determinar a los responsables.

Además se contribuya con la FGR en la integración de la carpeta de investigación iniciada con motivo de los actos de tortura cometidos en contra del joven.

Asimismo, solicita que un periodo no mayor de seis meses llevar acabo un diagnostico respecto del estado que guardan las carpetas de investigación en las que se encuentran involucrados elementos de la Policía Municipal de Mérida.

Por su parte, al presidente municipal de Mérida se le solicita una disculpa pública a los familiares de José Eduardo Ravelo por violaciones graves a derechos humanos cometidas en su agravio. Que se le otorgue a la madre de la víctima, María Ravelo, una reparación integral del daño, mediante el pago de una compensación y/o indemnización.

Además, solicitan que se realicen las diligencias necesarias para que sean inscritos en el Registro Nacional de Víctimas (RENAVI) para que tengan acceso al Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral.

El caso de José Eduardo Ravelo Echavarría de 23 años se dio a conocer luego de que el 21 de julio de 2021 fuera detenido, violado por policías de Mérida y días después muriera debido a las heridas.

El joven, originario de Veracruz, fue detenido por policías municipales en el centro de Mérida, quienes lo sometieron a interrogación por “parecer sospechoso”, aunque éste les aseguró que se encontraba ahí por una entrevista laboral.

A pesar de no haber una razón para su detención, los elementos se lo llevaron a una patrulla donde no se supo nada de él hasta un día después, cuando se puso en contacto con su madre a quien le contó que había sido golpeado y abusado sexualmente por los agentes.

María, madre de José Eduardo Ravelo, llegó a Mérida procedente de Veracruz para llevar a su hijo al hospital, donde le negaron la atención.

La mujer narró que en el hospital Agustín O’Horán cuestionaron a su hijo sobre su sexualidad y le pidieron hacerse unas placas, las cuales no podía costear.

María acudió a la Fiscalía General del Estado de Yucatán para interponer una denuncia contra los responsables, donde el joven rindió su declaración y fue examinado por un médico legista.

Las autoridades aseguraron que ya se habían girado oficios para investigar a los elementos presentes en la zona donde fue detenido.

Durante el análisis del estado de José Eduardo Ravelo se decidió trasladarlo a un hospital donde permaneció internado hasta que falleció el pasado 3 de agosto, por síndrome de obstrucción orgánica múltiple y politraumatismo.

La madre del joven llevó el féretro de su hijo a las puertas del Palacio de Gobierno de Yucatán. Entre lágrimas, pidió ser recibida por el gobernador Mauricio Vila.

Días después, elementos de la Policía Estatal de Investigación (PEI) de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), y de la Fiscalía General del Estado de Yucatán detuvieron a cuatro policías municipales de Mérida por la probable participación en el homicidio del joven. Sin embargo, días después los policías fueron liberados por falta de pruebas.

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