Productos de limpieza que no debes mezclar para evitar intoxicarte

Los productos de limpieza son esenciales para mantener nuestro hogar limpio y libre de gérmenes. Sin embargo, no todos los productos son compatibles entre sí, y algunos pueden generar reacciones químicas peligrosas al mezclarse. Conoce por qué no debes mezclar estos productos de limpieza y qué consecuencias puede tener para tu salud y la de tu familia, según la Organización Panamericana y Mundial de la Salud (OPS/OMS).

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1. Lejía con amoniaco

Esta es una de las mezclas más peligrosas que puedes hacer, ya que produce un gas altamente tóxico llamado cloramina. Este gas irrita las vías respiratorias y los ojos, y puede provocar asfixia, tos, dolor de pecho, náuseas y mareos. El amoniaco se encuentra en algunos limpiadores de cristales, desengrasantes y abrillantadores de metales. Nunca uses lejía con estos productos ni en superficies que hayan sido limpiadas con ellos.

2. Alcohol en gel con lejía

Otra combinación que debes evitar a toda costa es la de alcohol en gel con lejía, ya que produce cloroformo y ácido clorhídrico. Estas sustancias son altamente tóxicas al inhalarse y provocan daños en la piel, ojos, riñones, hígado y sistema nervioso. El cloroformo puede causar pérdida de conciencia, depresión respiratoria y paro cardíaco. El ácido clorhídrico puede corroer los tejidos y causar quemaduras químicas.

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3. Lejía con vinagre

El vinagre es un producto natural que se usa para limpiar y desinfectar diversas superficies, pero no debe mezclarse con lejía. Al hacerlo, se forma gas cloro, que provoca quemaduras graves en los ojos y las vías respiratorias. El gas cloro puede causar dificultad para respirar, tos con sangre, edema pulmonar y neumonía. Si accidentalmente mezclas lejía con vinagre, ventila inmediatamente el lugar y busca atención médica.

4. Bicarbonato de sodio y vinagre

Si bien esta mezcla no es dañina para la salud, se debe evitar mantenerla en recipientes cerrados por riesgo de explosión. El bicarbonato de sodio y el vinagre reaccionan entre sí y producen dióxido de carbono, que aumenta la presión dentro del envase. Si el envase no tiene alguna vía o válvula de escape, puede estallar y causar daños materiales o lesiones. Esta mezcla se usa para destapar cañerías o limpiar hornos, pero se debe aplicar directamente sobre la superficie sin guardarla y al instante.

5. Vinagre y agua oxigenada

Esta mezcla produce ácido peracético, que irrita la piel, los ojos, la garganta, la nariz y los pulmones. El ácido peracético puede causar dermatitis, conjuntivitis, bronquitis y asma. Además, puede ser corrosivo para los metales y dañar las superficies. El vinagre y el agua oxigenada se usan como desinfectantes naturales, pero no deben mezclarse ni aplicarse uno después del otro.

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6. Lejía y agua oxigenada

Esta mezcla forma cloratos o percloratos, que son sustancias utilizadas en explosivos. Ante cualquier estímulo de calor, esta mezcla podría generar una explosión. Los cloratos o percloratos pueden ser también tóxicos al ingerirse o al entrar en contacto con la piel o los ojos.

7. Lejía y agua caliente

El agua caliente produce la evaporación del cloro presente en la lejía, lo que genera hedores que pueden provocar intoxicación e irritación en las mucosas. El cloro también puede reaccionar con otros compuestos orgánicos presentes en el agua o en la superficie a limpiar, formando sustancias cancerígenas como las trihalometanos. La lejía se debe usar con agua fría o tibia, y siguiendo las instrucciones del fabricante.

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8. Lejía y potasa

Esta mezcla genera carbonato de potasio lo que tiene un efecto irritante en piel, ojo y membranas mucosas por contacto e irritación bronquial para respirar o edema pulmonar después de inhalarlo. La potasa se encuentra en algunos jabones y suavizantes. La ingestión es mortal.

Mezclar productos de limpieza sin el previo conocimiento de sus componentes químicos puede ser muy peligroso para tu salud y la de tu familia. Por eso, te recomendamos que siempre leer las etiquetas de los productos, seguir las indicaciones de uso y seguridad, que no mezcles productos innecesariamente y que almacenes los productos en sus envases originales y fuera del alcance de los niños y las mascotas. Así podrás limpiar tu hogar de forma segura y eficaz. Si quieres conocer más sobre estas mezclas tóxicos consulta este enlace.

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