El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, acudió como cada domingo a misa en una iglesia cerca de su casa en Wilmington, Delaware, un día después de haber dado su discurso de victoria en las elecciones presidenciales.
El exvicepresidente asistió junto a su hija Ashley y su nieto Hunter a la iglesia de Saint Joseph on the Brandywine, en Wilmington. Salió minutos antes de finalizar el servicio para evitar alterar al resto de los feligreses por la gran cantidad de periodistas reunidos a las afueras.
Poco después, Biden se dirigió a un cementerio cercano donde se encuentran enterrado su hijo Beau, así como su primera esposa, Neilia, y su hija Naomi.
El presidente electo anunció este domingo el lanzamiento de su equipo de transición junto a la vicepresidenta electa, Kamala Harris, y que estará centrado en los principales desafíos actuales del país; encarar al coronavirus, recuperación económica, avanzar en la equidad racial y el combate a la crisis climática.
Con información de EFE
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