Con helado de pescado luchan contra el calor animales de zoológico
La dieta de los animales del zoológico ha sido modificada para combatir las altas temperaturas, entre los que se incluye el helado de pescado.
Quienes se han visto afectados por las altas temperaturas son los animales, incluso, aquellos que se encuentran en los zoológicos y que reciben atenciones especiales, por lo que en un intento de ofrecerles una estancia más cómoda sus cuidadores han agregado helado de pescado para luchar contra el calor.
Esta estrategia se ha llevado especialmente en el Zoo Aquarium de Madrid, donde los nutriólogos de los animales han optado por agregar helados de pescado, fruta, verdura y de sangre para que las especies no sientan los golpes de calor.
La directora de Comunicación del Zoo Aquarium de Madrid, María José Luis Cerezo, explicó que los especialistas encargados del cuidado de los animales han optado por modificar la dieta de los animales para que no sufran de las consecuencias de las altas temperaturas que se han reportado en varias regiones del mundo.
“Adaptar la alimentación de todos los animales con dietas que lleven enriquecimiento helado”, explicó la directora.
Animales consentidos con helado por calor
De acuerdo con las declaraciones de la directora ante Europa Press Televisión, los lobos grises reciben helados de sangre mientras que los osos pardos disfrutan de helados de frutas como la pera, naranja y sandía.
Asimismo, las nutrias se refrescan con truchas heladas. Es así que a cada animal se le adaptó un menú especial para combatir las altas temperaturas y no sufrir de las consecuencias.
“En el caso de los animales de pelo largo que pasan más calor pues les ponemos más polos, como es el caso de los pandas gigantes, los osos pardos o los lobos grises. A los osos pardos les ponemos las frutas que habitualmente comen en verano, a los pandas les encanta la sandía y a los lobos se les mete sangre fresca como grandes carnívoros”, señaló la directora.
Por otra parte, indicó que los animales no sólo gozan de una dieta balanceada y apta para las temperaturas, sino que también cuentan con lugares especiales para poder refrescarse y no sufrir del intenso calor de verano.
“Tienen zonas adicionales donde se refrescan que a veces pasan desapercibidas para el público. Los osos pardos tienen una piscina entre las rocas, los cérvidos y lobos tienen aspersores, y ellos a lo largo del día deciden si se bañan, se refrescan o se recogen a zonas de invierno o sombra”, puntualizó María José.
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MVA