Autorretrato de Frida Kahlo con Diego Rivera fija récord en subasta

Un autorretrato de Frida Kahlo con su esposo, el artista Diego Rivera, se vendió el martes en una subasta por 34.9 millones de dólares, el precio más alto jamás pagado por una pintura de un artista latinoamericano.

Concluido en 1949, la obra “Diego y yo” de Kahlo pasó bajo el martillo en Sotheby’s en Nueva York y se vendió a un comprador no identificado, dijo la casa de subastas.

“Esta es una de las obras más importantes de Kahlo en subasta”, dijo Oliver Barker, subastador y director senior de Sotheby’s, al abrir la licitación.

La pintura muestra a Frida Kahlo con los ojos llorosos y el cabello suelto, con un retrato de Diego Rivera incrustado sobre su frente. Rivera aparece con un tercer ojo.

El cuadro subastado ha sido analizado como símbolo de la relación de la artista con su esposo. Señalan que en dicho momento la artista “era plenamente consciente de que, a pesar de haber alcanzado autonomía creativa, su cuerpo y su salud estaban en decadencia”.

Frida Kahlo, quien pasó largos periodos postrada en cama tras un accidente en su juventud, creó unas 200 pinturas, bocetos y dibujos, principalmente autorretratos, en los que transformó su desgracia en obras de color atrevido y fuerza emblemática.

El autorretato fue un género recurrente en Frida Kahlo desde los años 20, que mantuvo hasta su muerte en 1954. No eran una representación corporal, sino una muestra de sus contextos culturales y políticos.

Frida Kahlo alcanzó fama internacional después de su muerte en 1954, y después de la década de 1970 se convirtió en un ícono feminista.

La venta del retrato de Frida Kahlo estuvo precedido por un cuadro de Leonora Carrington y la subasta siguió con otro de Remedios Varo, en un desfile de arte de mujeres surrealistas en México.

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sga