Flossie, es la gatita más vieja del mundo, tiene 120 años humanos
La gatita Flossie ya es parte del libro de los Guinnes Record pues ha alargado sus siete vidas a todo lo que da, hasta alcanzar los 120 años humanos.
Flossie es una gatita marrón que este 2022 cumplió 27 años, lo cual se traduce a 120 años humanos, es de origen británica y está inscrita oficialmente en el Libro de los Records Guinnes como la gatita viva más longeva del mundo.
Como todos los seres vivos, la edad ya ha causado estragos en su salud, por lo que a esta edad, está un poco sorda y un poco ciega, pero sigue siendo un felino amoroso y ronronero.
New record: Oldest living cat - Flossie aged 26 years and 329 days 😸
— Guinness World Records (@GWR) November 23, 2022
She's the human equivalent of 120 years old! https://t.co/4dyGE4L0nV pic.twitter.com/JJd9gXSKmV
Nuevo récord: gato vivo más viejo - Flossie de 26 años y 329 días 😸 ¡Ella es el equivalente humano de 120 años!
¿Cuál es el origen de Flossie?
Flossie es el claro ejemplo de que los gatos tienen 7 vidas y ella las ha explotado al máximo, pues la mayor parte de su vida, pues a pesar de que nació en la calle, ha estado en varios hogares, pero ha tenido que despedirse de sus humanos en condiciones tristes.
De acuerdo a la publicación de Guinnes World Records, su actual humana, responde al nombre de Vicky , refiere que Flossie todavía es una gatita juguetona y curiosa, toda vez que tiene una gran capacidad de adaptación a los nuevos entornos.
A decir de la Cats Protection, una organización que da refugio a mascotas, recibieron a Flossie apenas en agosto 2022 y tras rastear su historial se dieron cuenta de su edad, lo cual es inusual, pues un gato promedio vive entre 10 y 15 años, de acuerdo a los cuidados que reciba.
La historia de Flossie
De acuerdo a los registros, Flossie nació aproximadamente en diciembre de 1995, fecha en la que fue rescatada por un trabajador de un hospital cuando era un cachorro que deambulaba por las calles y decidió quedarse con él 10 años, hasta que su humano murió.
Entonces la hermana de su humano la llevó a su casa, donde vivió feliz 14 años más, hasta que nuevamente su segundo humano murió, por lo que Flossie fue acogida por uno de los hijos de la segunda humana, hasta que tuvo que darla en adopción pues un gato mayor requiere de más cuidado.
Fue así como Flossie llegó a Cats Protection y conoció a Vicki que en lugar de adoptar un cachorro, decidió darle la oportunidad de un hogar a Flossie, para que su vida termine en un hogar y no en un refugio.
Con información de Guinnes World Records
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