Un recuento de la crisis en Perú y su relación con México

La crisis en Perú podría repercutir en nuestro país y la relación bilateral con esa nación al ofrecerle asilo político al expresidente Pedro Castillo.

Actualizado el 22 diciembre 2022 13:51hrs 4 minutos de lectura.
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Escrito por: Redacción adn40
Crisis en Perú
Getty Images

El pasado miércoles 8 de diciembre, el entonces presidente de Perú, Pedro Castillo emitió un mensaje donde anunció la disolución del Congreso, convocó a elecciones Constituyentes en un plazo no mayor a 9 meses; declaró la necesidad de instaurar un gobierno excepcional de emergencia que gobernara mediante decretos-ley y notificó un toque de queda a nivel nacional.

En respuesta, las autoridades peruanas (el congreso, el tribunal superior y la propia vicepresidenta) consideraron este acto como un golpe de Estado, a pesar de que esta no sería la primera ocasión en la que un presidente de la República peruana disuelve el Congreso. En el año 2019 el expresidente Martín Vizcarra también lo decretó la disolución del Congreso y llamó a elecciones ante su enfrentamiento con el parlamento, a lo que el congreso respondió aprobando la suspensión de sus funciones presidenciales durante 12 meses por “incapacidad temporal”.

¿A qué se debe lo ocurrido en Perú?

La República de Perú tiene un sistema híbrido, que participa del parlamentarismo y del presidencialismo, esto ha dado facultades para que el congreso pueda quitar a cualquier presidente por “permanente incapacidad moral”, o bien el presidente puede disolver al congreso por pérdida de confianza y convocar a elecciones. Esto ha generado inestabilidad política en Perú , dado a los múltiples cambios presidenciales en poco más de 5 años.

El anuncio de Pedro Castillo se dio horas antes de que el Congreso iniciara la discusión de una “moción de vacancia” contra él, siendo la tercera en 18 meses de su mandato. Para que una moción de este tipo proceda, se necesitan 87 votos a favor, correspondientes a dos tercios de los 130 miembros del Congreso.

Pedro Castillo, abiertamente un político de izquierda se enfrentaba a una difícil situación teniendo una mayoría parlamentaria de derecha. Ante la tensión política en el margen de la “moción de vacancia”, tomó la apresurada decisión de convocar un Estado de excepción.

Al ser destituido del cargo y arrestado por autoridades nacionales peruanas, la vicepresidenta Dina Boluarte ha sido nombrada presidenta del país con 101 votos a favor, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar el cargo y en la sexta mandataria del país en un lapso de 5 años.

¿Cómo afecta la crisis de Perú a México?

Pablo Monroy embajador de México en Perú visitó el jueves pasado al expresidente Pedro Castillo, en el centro penitenciario donde se encuentra recluido y le extendió formalmente la solicitud de asilo. Esto ante la historia bilateral entre México y la República de Perú en materia política como la Alianza del Pacífico en 2011 o económica siendo un socio estratégico para México desde el 17 de julio de 2015 con el vigente acuerdo de Asociación Estratégica (AAE), y siguiendo el Art. 11 constitucional, el Art. 3, fracción III de la Ley de Migración, el Art. 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; Art. 1 de la Declaración sobre Asilo Territorial; el Art. 27 de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre 1948; Art. 22 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos 1969 “Pacto de San José”; la cancillería informó que se llevarían a cabo los procesos correspondientes y el martes 20 de diciembre de 2022 la Secretaria de Relaciones Exteriores mexicana informó que concedió dicho asilo político a la familia del exmandatario Pedro Castillo .

Sin embargo, esta postura tensionó la relación diplomática entre la Republica peruana y la mexicana.

Además, México tomó una postura en unión con Argentina, Colombia y Bolivia al declarar que Pedro Castillo fue víctima de “hostigamiento” político desde que inició su mandato y exhortaron al nuevo gobierno de Perú a “abstenerse de revertir la voluntad popular expresada” a través de la democracia.

Como era de esperarse, esta postura tensionó la relación diplomática entre la República peruana y mexicana, al grado de que la presidenta peruana Dina Boluarte declaró como “persona non grata” al embajador de México, Pablo Monroy Conesa y le dio 72 horas para que abandone Lima por una “injerencia”, desde el 2019 con la embajadora mexicana María Teresa Mercado Pérez, en Bolivia que no se expulsaba a un representante del servicio exterior mexicano.

Ante esto vale la pena revisar el futuro de la actividad diplomática entre Perú y México, por su parte la Secretaria de Relaciones Exteriores expresó en un comunicado: “El gobierno de México toma nota de la comunicación por la que se declara persona non grata al embajador Pablo Monroy Conesa. La Secretaría de Relaciones Exteriores ha instruido al embajador Pablo Monroy Conesa regresar a México con el fin de resguardar su seguridad e integridad física”, mientras que el presidente López Obrador manifestó que no se romperían los lazos entre ambas naciones a pesar de esta fractura, con el fin de proteger tanto acuerdos económicos como el bienestar de los mexicanos que se encuentren en Perú.

Por otra parte, la familia Castillo conformada por Lilia Paredes Navarro, esposa del expresidente de Perú y sus dos hijos llegaron este miércoles a México como parte del asilo otorgado, mientras que aún se espera la llegada del embajador Pablo Monroy.

Con información de María Fernanda Alarcón.
@mafer_alarcon_

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