Soliloquio: Estas son las ventajas de hablar solo

Hablar solo no es un signo de locura, sino de inteligencia. Un soliloquio es una forma de expresión verbal en la que una persona mantiene una conversación consigo misma, sin esperar una respuesta de alguien más. Es una práctica muy común y natural, que puede tener diversos beneficios para la salud mental y el desarrollo personal, según la ciencia.

Más allá del estigma, el soliloquio puede ayudar a la memoria, la seguridad, la concentración, entre otros beneficios. Incluso echar el chisme por tu cuenta no podría ser tan descabellado como parece.

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¿Por qué hablamos solos? Los motivos pueden ser variados, pero en general se trata de una forma de organizar nuestros pensamientos, emociones e información personal. Al verbalizar lo que nos pasa por la mente o practicar el soliloquio, podemos tener una mayor claridad, concentración y creatividad. También podemos usar el soliloquio para motivarnos, alentarnos o consolarnos en momentos difíciles.

De hecho, varios estudios han demostrado que el soliloquio y las personas que hablan solas tienen un mejor rendimiento cognitivo, una mayor capacidad de memoria y una mayor autoestima. Además, el soliloquio puede mejorar nuestras habilidades sociales, ya que nos ayuda a ensayar posibles conversaciones con otras personas, anticipar sus reacciones y resolver conflictos.

“No es algo que se haga irracionalmente. No sabes todo lo que vas a decir. Te podría incluso sorprender”, apuntó Gary Lupyan, profesor asociado de psicología de la Universidad de Wisconsin, EE.UU. y estudioso del impacto de escucharnos a nosotros mismos sobre la memoria, para la BBC.

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Lupyan realizó una investigación con dos grupos de participantes. Ambos tenían que ver un objeto proyectado en una pantalla. Algunos de ellos podían nombrar lo que veían, mientras los demás permanecían callados. De esta manera se detectó que quienes podían verbalizar y nombrar al objeto, identificaron y localizaron más rápidamente lo que se proyectaba sobre la pantalla.

Esto ayudó a entender que decir algo en voz alta ayuda al cerebro a activar información adicional sobre algún objeto, su aspecto, descripción e información.

“Decir un nombre en alto es una poderosa clave de recuperación”, destacó Lupyan. “Piensa en eso como un indicador para una parte de información en tu mente. Escuchar el nombre exagera lo que podría suceder normalmente cuando solo lo traes a la memoria. El lenguaje impulsa ese proceso”.

No hay una forma correcta o incorrecta de hablar solo, pero hay algunos consejos que pueden ayudarnos a aprovechar al máximo esta herramienta:

- Practica el soliloquio en voz alta, pero no demasiado fuerte. Esto te ayudará a escuchar tu propia voz y a enfocarte en lo que dices.

- De acuerdo con Ethan Kross, neurocientífico y psicólogo experimental de la Universidad de Michigan, en una investigación publicada en la revista Harvard Business Review, practicar el soliloquio o hablarte en tercera persona (al utilizar tú, el, ella) evoca una sensación de bienestar personal y eleva la confianza, lo que además ayuda a controlar los sentimientos y emociones de manera efectiva.

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“No solo el diálogo interno en segunda y tercera persona ayuda a la gente a tener mejor rendimiento bajo estrés y a controlar las emociones, sino que también contribuye a que tomen sus decisiones más sensatamente”, dijo Kross para la BBC.

- No seas tan duro contigo mismo. Evita las críticas, juicios o comentarios destructivos hacia tu persona. Habla con respeto, cariño y comprensión. Trata de ser tu mejor amigo y no tu peor enemigo.

- Otros expertos aseguran que hablar en primera persona y usar pronombres como “yo”, “me” o “mí", también ayuda a conectar con tus sentimientos y necesidades. Utiliza lo que mejor te acomode.

El soliloquio es una forma de autoconocimiento y autocuidado que todos podemos practicar. No tengas miedo ni vergüenza de hablar solo. Es una manera de expresarte, de escucharte y de entenderte mejor.

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