Por esta razón debes lavar tu brasier con más frecuencia

A pesar de ser una prenda interior esencial en la vida de muchas personas, el brasier tiende a ser tratado con poca consideración en lo que respecta a su limpieza. La mayoría de nosotros rara vez pensamos en cuán a menudo debemos lavarlo, pero la realidad es que hay razones importantes para hacerlo con regularidad. Los expertos explican por qué es crucial limpiar tus brasieres de manera periódica, incluso si no parecen visiblemente sucios.

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El uso de un brasier sucio puede conllevar riesgos para la salud de la piel. Según la Dra. Leah Ansell, dermatóloga certificada en Nueva York , las infecciones por hongos son comunes en el área bajo los senos y pueden ser causadas por una levadura llamada Candida. Esta levadura prospera en lugares oscuros y húmedos, lo que hace que la zona debajo de los senos sea propensa a estas infecciones. El uso de un sostén no lavado adecuadamente puede agravar este problema. Además de las posibles infecciones , un brasier sucio también puede acumular residuos, como piel muerta, suciedad y sudor. Lavarlo regularmente ayuda a mantenerlo limpio y libre de estos elementos.

La frecuencia de lavado de los sostenes depende del tipo de sostén. En general, los expertos sugieren que los brasieres normales se pueden usar de tres a cuatro veces antes de lavarlos. Sin embargo, los sostenes deportivos deberían lavarse después de cada uso, ya que tienden a acumular más sudor y bacterias.

Cuando decidas lavar tus sostenes, debes hacerlo con cuidado. Puedes optar por lavarlos a mano o en la lavadora, pero es importante tratarlos con suavidad. Utiliza un ciclo delicado o programa para ropa delicada si decides usar la lavadora. Además, es recomendable colocarlos en una bolsa de lencería para protegerlos y evitar que se enganchen con otras prendas. Es fundamental evitar el uso de secadoras, ya que el calor puede dañar la elasticidad del sostén. Deja que se sequen al aire libre para prolongar su vida útil.

Una regla general sugerida por los expertos es cambiar un sostén después de su primer año de uso. Sin embargo, si observas que la banda sube o que la parte delantera ya no queda plana, es un indicativo de que el brasier ha perdido su soporte y es hora de reemplazarlo. Cambios en el cuerpo, como el embarazo , la menopausia o el aumento o pérdida de peso, también pueden requerir la compra de nuevos sostenes que se ajusten adecuadamente a tu nueva forma.

Aunque no se vean sucios, es esencial lavar los sostenes con regularidad para evitar riesgos para la salud de la piel, mantener su forma y asegurar que brinden el soporte necesario. Además, seguir las recomendaciones de cuidado adecuado puede prolongar la vida útil de estas prendas esenciales en el armario de cualquier persona.

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