Se prevé que la producción de miel en México aumente 5.8%

Se prevé que México tenga una producción de 65 mil 649 toneladas de miel en este 2022, lo que implicaría un aumento de 5.8% a comparación con el volumen que se registró en el 2021; hay un avance de 52% de esta previsión al cierre de junio.

El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, informó aceraca de este aumento de miel en el evento Nuestra Riqueza: La Miel y la presentación del billete conmemorativo de la Lotería Nacional.

Villalobos Arámbula refirió que hace un año se produjeron más de 62 mil toneladas de miel y el 51% se destinó al mercado de exportación. Destacó que México es el noveno productor y el décimo exportador a nivel mundial.

Además, mencionó que en el 2020 las exportaciones mexicanas llegaron a 33 países con un volumen de 27 mil 725 toneladas y para el 2021 se incrementó un 16% respecto al año anterior.

Otro dato refiere que Alemania importa entre 40 y 50% del total de la miel que México ofrece a otros países, por lo que, expresó el titular de Agricultura y Desarrollo Rural, se trata de un esfuerzo y trabajo constante de las más de 43 mil familias apicultoras que se ubican en las 32 entidades federativas, con un inventario de más de dos millones de colmenas.

Víctor Villalobos afirmó que la miel es uno de los alimentos con mayor tradición e historia en el país, donde además hay cerca de dos mil especies de abejas, lo que representa que el 75% de los cultuvos alimentarios del mundo dependen de la polinización.

En principio si las abejas pasan de estar en “peligro de extinción” a “extintas”, deberíamos despedirnos de muchas flores silvestres como las orquídeas, que solo son polinizadas por las abejas.

Esta extinción, luego, provocaría una alteración en los hábitats naturales de esas plantas, otros pequeños animales no tendrían alimento y se unirían a la suerte de las abejas.

La extinción de las abejas también provocaría un desequilibrio drástico en la agricultura humana. Ya que, si bien conservaríamos muchas variedades de cereales, que son polinizados por el viento y no por las abejas , perderíamos muchos otros muy importantes.

Muchas frutas y verduras, que sí depende de la labor de las abejas no podrían cultivarse a una escala tan grande ni tan barata. Pasarían a ser productos de lujo, para solo una pequeña parte da la población mundial.

Los humanos deberíamos pensar en alternativas manuales, que son realmente costosas y poco efectivas. En Japón, por ejemplo, ya han desarrollado unos pequeños robots voladores, que son capaces de reemplazar el trabajo de polinización, pero de forma inorgánica y con costos irrisorios.

Si las abejas que actualmente están en peligro de extinción, finalmente desaparecen, sin duda que muchas especies animales y vegetales no serán más que solo un recuerdo.

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ldb