Situación del agua en el Valle de México | Ciudad 25
El invitado, Jorge Fuentes, señala que la región está experimentando un momento complicado con lluvias atípicas, mencionando que las precipitaciones recientes de 91 milímetros no se habían visto en más de 30 años, en contraste con la peor sequía que enfrentó el Valle de México hace solo dos años.
El invitado, Jorge Fuentes, señala que la región está experimentando un momento complicado con lluvias atípicas, mencionando que las precipitaciones recientes de 91 milímetros no se habían visto en más de 30 años, en contraste con la peor sequía que enfrentó el Valle de México hace solo dos años. Atribuye estos cambios meteorológicos al cambio climático y subraya la necesidad de que la ciudad tenga planes de protección y resiliencia para adaptarse a épocas de sequías e inundaciones, planes que actualmente no existen.
El experto explica que, si bien el próximo año no se prevé escasez de agua, ya que el Sistema Cutzamala podría superar el 90% de su almacenamiento, las recientes lluvias han excedido la capacidad de desagüe de la infraestructura instalada, especialmente en el oriente y norte de la ciudad. Esto se debe a una infraestructura obsoleta, la falta de mantenimiento y la extracción excesiva de agua del subsuelo, que representa el 60% del consumo de la ciudad. Esta sobreexplotación provoca el hundimiento de la ciudad, especialmente en zonas como Tláhuac y Xochimilco, lo que fractura la infraestructura y reduce la capacidad de desalojo de agua. Por ello, es necesario implementar infraestructura que permita la infiltración del agua.
Jorge Fuentes afirma la necesidad de invertir en infraestructura hídrica, señalando que el presupuesto de la Comisión Nacional del Agua es insuficiente para todo el país. Destaca que las obras hidráulicas requieren periodos largos de inversión, lo que a menudo desmotiva a los gobiernos a comprometerse con ellas, ya que no verán su inauguración.
Reconoce que el gobierno de la Ciudad de México ha invertido en temas de agua, pero el presupuesto es completamente insuficiente. Propone la implementación de “infraestructura verde”, como la restauración de lagunas, jardineras infiltrantes y el uso de adoquines o cemento permeable para gestionar el agua de lluvia. Subraya que no se puede seguir abandonando la infraestructura por décadas, como el Sistema Cutzamala, diseñado para 20 años y que lleva 50 funcionando, o las redes de distribución con 20 o 30 años de antigüedad que pierden hasta el 40% del agua por fugas.
El experto insiste en que el gobierno no puede eludir la responsabilidad de invertir en el agua, sugiriendo que las afectaciones económicas por inundaciones superan los 10 mil millones de pesos anuales. Para ello, recomienda considerar asociaciones público-privadas, dado que el gobierno no dispondrá de presupuestos suficientes. Como ejemplo, menciona la planta de tratamiento de Atotonilco. Asimismo, critica la baja tasa de reutilización de agua en el Valle de México (menos del 10%), principalmente para riego de jardines, y aboga por invertir en tecnología para reutilizar el agua en procesos productivos y, eventualmente, en la regeneración de aguas residuales para convertirlas en agua potable.