“El diluvio que vino” y el dilema de “desmantelar o no”: crisis climática, omisiones políticas y un país que calienta

Texas vivió una tragedia histórica: en solo cinco horas, el río Guadalupe subió más de 10 metros, arrasando con campamentos infantiles y dejando 120 muertos y 200 desaparecidos. Se trata de una de las inundaciones más costosas y destructivas en la historia de EE.UU., con pérdidas de más de 22 mil millones de dólares. Nadie asume la responsabilidad. Mientras tanto, México se calienta 3.5 °C —muy por encima del promedio mundial— y la presidenta Shein inaugura una planta de ciclo combinado que promete reducir emisiones y consumo de agua. ¿Basta con eso? ¿Hay que construir o desmantelar? ¿Podemos evitar el próximo diluvio? Villalobos y Ruiz Healy lo plantean sin rodeos.