Síndrome de Stendhal: Lo que experimentan los turistas en Florencia

Se dice que el síndrome de Stendhal es una enfermedad psicosomática que experimentan los turistas luego de ser testigos de la vasta cantidad de riquezas artísticas en Florencia, pero ¿qué tan cierto es esto?

Es normal que las personas experimenten ciertas sensaciones cuando tiene un estímulo que las motive, sin embargo algunos pueden ser más sensibles a ellos, al grado que la belleza de una obra de arte o paisaje puede causar cosas extrañas e inexplicables.

Estos casos extremos han sido catalogados como síndrome de Stendhal, del viajero o de Florencia, pues aparentemente todo tiene que ver con lo que los turistas experimentan ante la abundancia de arte en la ciudad.

En el año 1817, Henri-Marie Beyle, escritor francés, mejor conocido por el seudónimo de Stendhal, se trasladó hasta la ciudad italiana de Florencia seducido por su belleza y la estrecha vinculación con los mejores artistas renacentistas.

Durante su viaje, el escritor visitó la Basílica de la Santa Cruz y dijo experimentar una serie de sensaciones y emociones que, décadas después, serían reconocidas como el cuadro sintomatológico del síndrome de Stendhal.

En ese entonces la recurrencia de este tipo de sensaciones, que llegaba a causar mareos, vértigos y desvanecimientos, fue documentada como un caso único en la ciudad de Florencia y no se le acuñó como un síndrome.

Tiempo después, la psiquiatra del Hospital Santa Maria Nuova de Florencia, Graziella Magherini, definió y categorizó clínicamente el síndrome de Stendhal como un trastorno psiquiátrico.

Esto luego de observar a 106 pacientes, todos ellos turistas, que experimentaron cosas similares a las descritas por Stendhal: mareos, palpitaciones, alucinaciones y despersonalización al contemplar obras de arte como las esculturas de Miguel Ángel y las pinturas de Botticelli.

Básicamente el síndrome de Stendhal se define como un malestar psíquico derivado de la exposición a un entorno rico en objetos de arte.

Resulta innegable que algunas expresiones artísticas despierten emociones únicas entre las personas, sin embargo el síndrome de Stendhal refiere a la experimentación de sensaciones muy intensas.

En su momento, la psiquiatra Magherini realizó varias estadísticas entre los turistas que acudían al hospital refiriendo síntomas similares a los que relato Stendhal y así los clasificó en tres tipos:

• 66 por ciento de los turistas presentaba alteraciones en la percepción de sonidos o colores, sentimiento persecutorio o de culpa y ansiedad.
• 29 por ciento de los turistas tenían sentimiento de inferioridad como inutilidad, precariedad e insuficiencia, o de superioridad como euforia, exaltación y omnipotencia.
• 5 por ciento de los turistas experimentaron crisis de pánico, angustia, dolor precordial, sudor, desvanecimiento, taquicardia o malestar epigástrico.

Hoy en día, aún existe cierta controversia y se debate si realmente este trastorno se puede catalogar como tal.

Además, después de que se acuñara el síndrome de Stendhal, varios turistas viajaron a Italia , específicamente a la ciudad toscana de Florencia en aras de ver si experimentaban lo mismo.

De ahí que una gran parte de la comunidad científica califique que la excesiva divulgación del síndrome de Stendhal esté motivada por intereses económicos por parte de la propia ciudad de Florencia, para aumentar la reputación de la belleza de sus monumentos artísticos y atraer a un mayor número de turistas.

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