De ahí que el empuje económico no se vea muy vigoroso al arrancar el año, con expectativas de crecimiento del PIB que ya se ubican debajo del 2%.
Un elemento que desde el año pasado trae nerviosas a las empresas, es la reforma eléctrica.
La idea ahora es cortar esa potencial fuente de inversiones para regresar al monopolio de CFE.
La nueva propuesta seguramente va a generar muchos amparos si se aprueba como está, ya que se afectan figuras como el autoabastecimiento que es una vieja realidad.