Usar mucho tu teléfono no reduce ni afecta tu inteligencia: estudio
El teléfono no disminuye la capacidad de cognición e inteligencia, así lo determinó un estudio de la Universidad de Toronto.
Al contrario de lo que la creencia popular sostiene, utilizar de forma periódica el teléfono móvil, las tabletas o computadores, no reduce la inteligencia, ni la capacidad cognitiva. Lo reveló un estudio de la Universidad de Toronto.
La tecnología y la “disminución” de la inteligencia
Cada vez que una nueva tecnología irrumpió en la sociedad, muchos sabios la consideraron una amenaza, porque libera a la mente de hacer ciertos ejercicios que muchos consideran importantes para desarrollar la inteligencia.
Sucedió con Sócrates en siglo IV a.c. cuando la escritura comenzó a popularizarse. Para el filósofo, esta tecnología provocaría mentes más perezosas, ya que no sería necesario recordar algo en la memoria, al tenerlo disponible en una hoja.
Más adelante en el tiempo, durante el siglo XX el debate sobre la inteligencia volvió a ponerse en boga cuando el teléfono, la radio y la televisión irrumpieron en el desarrollo de la comunicación.
De igual forma, en el siglo XXI la irrupción del teléfono inteligente ha provocado una serie de hipótesis de que socava nuestra capacidad para recordar, prestar atención y ejercer el autocontrol.
La teoría ahora fue desmentida por un estudio efectuado por Lorenzo Cecutti y Spike W.S. Lee de la Universidad de Toronto, Canadá. Durante la investigación se revisó evidencia empírica que refuta a las principales ideas sobre el uso del teléfono.
El estudio que afirma que el teléfono no disminuye la inteligencia
El estudio comienza definiendo que la mala fama del teléfono y su injerencia sobre la inteligencia, está basada en dos supuestos que no han sido confirmados.
- La primera suposición es que el impacto tiene un efecto duradero sobre las capacidades cognitivas a largo plazo.
- La segunda es que la tecnología digital tiene un impacto directo y no moderado en la cognición.
Los científicos del estudio se basaron en una investigación que sugiere que los efectos en la inteligencia han sido temporales, y no a largo plazo.
En esa investigación se les pidió que recordaran información a un grupo de personas, en dos momentos diferentes. En el primer momento se les indicó que la información sería tambíen almacenada en computadora, y en el segundo no.
Las personas recordaron mejor la información cuando se les dijo que no se guardaría, esto significa que cuando la tecnología estaba disponible, la gente confiaba en ella, pero cuando no estaba disponible, la gente seguía siendo perfectamente capaz de usar su inteligencia y memoria para recordar.
Por otro lado, se basaron en un estudio que llegó a la conclusión de que el teléfono no influye en la memoria e inteligencia, sino que la razón es otra: la motivación.
Esta investigación comprobó que la atención sostenida, memoria de trabajo o inteligencia fluida funcional, no depende del uso o no del teléfono inteligente, sino de qué tanto interés despierte la tarea en la persona.
La conclusión del estudio sobre la inteligencia y el uso del teléfono inteligente indica que en realidad esta tecnología ha cambiado la cognición, no la ha disminuido.
Gracias a las nuevas tecnologías los procesos cognitivos se centran menos en el almacenamiento, liberándonos de tener que realizar funciones como recordar una cita.
De este forma, gracias al teléfono y a las nuevas tecnologías podemos lograr más, cognitivamente hablando, de lo que nunca antes podíamos, porque se amplía la capacidad de inteligencia y concentración en otras tareas, según indicó el estudio.
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Gm
