¿Qué tan reales son las imágenes del hielo en la última película de George Clooney?
La producción de la reciente película protagonizada por George Clooney tuvo que enfrentarse a extremas temperaturas bajas para poder grabar algunas de las escenas y dar ese toque de realismo.
El pasado 23 de diciembre se estrenó la película Cielo de medianoche, la cual pertenece a George Clooney, pero algo que ha dejado impactado son las escenas que se muestran a lo largo del filme, por lo que gran parte del público se pregunta sobre qué tan reales son esas imágenes de hielo.
Esta nueva película estrenada en la plataforma de Netflix se basa en una reflexión sobre el cambio climático, el concepto del hogar, así como de la familia y la necesidad humana de conexión con otros seres a través de una historia que comienza en el Barbeau Observatorio, una supuesta base del Círculo Ártico.
De este lugar salen helicópteros militares con población civil, ya que algo está ocurriendo en estas tierras; sin embargo, Augustine (Clooney), un hombre muy enfermo se niega a aceptar el plan de escape, pues también intenta conectar con tripulantes de una nave espacial para que no regresen a pesar de que llevan dos años en el espacio.
Pero, más allá de la trama, algo que ha impactado a los espectadores son los lugares en los que se desenvuelve cada uno de los personajes, pues resultan ser espectaculares y, para algunos, poco creíbles.
Ante ello, se ha mencionado que la película logró realizarse tanto en Islandia como en La Palma, así como en los estudios de Shepperton, en Londres, para realizar aquellas tomas del interior de la nave espacial.
Asimismo, el actor George Clooney ha mencionado a medios internaciones que gran parte de la historia fue grabada en el glaciar Vatnajökull, el cual se encuentra localizado en Islandia. Especificó que las grabaciones tuvieron que realizarse en el mes de octubre debido a que tuvieron toda la noche que necesitaban, pero sin temperaturas que atentaran con su vida.
El actor y productor de esta cinta también dijo que experimentaron temperaturas de –28 grados, por lo que la congelación de su barba que sale en algunas escenas es 100% real, según sus afirmaciones.
Por su parte, Grant Heslov, socio de Clooney, mencionó que los rodajes estaban en medio de la nada y que desde el campamento hasta el lugar de la grabación tenían que viajar a lo largo de dos horas y en motonieve.
Era un trabajo en glaciar de verdad, teníamos expertos diciéndonos por dónde andar para no caer por un precipicio, para que no hiciéramos tonterías. Pero fue muy divertido ir por ahí con las motonieves y vivir esa vida por unos días. Era el único sitio donde podíamos rodar, sinceramente
Asimismo, especificaron que también realizaron algunos escenarios que la isla de La Palma ofrecía, pues el Observatorio del Roque de los Muchachos funcionó para ser el Barbeau Observatory, aunque se necesitó de algunos retoques de forma digital para incluir la nieve.
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