Las vitaminas a menudo son recomendadas por médicos y nutricionistas para complementar la falta de nutrientes en la dieta de sus pacientes. No obstante, mucho de algo bueno puede convertirse en algo malo, entérate de qué es la sobredosis de vitaminas y cómo evitarla.
Efectivamente, tomar vitaminas en exceso puede acabar en una sobredosis perjudicial para la salud. Es por ello que el Instituto de Medicina de Estados Unidos ha establecido pautas como la RDA (cantidad dietética recomendada) y DV (valor diario) para ayudar a las personas a comprender la dosis diaria sugerida de vitaminas.
Sobredosis de vitaminas, ¿qué es y cómo ocurre?
La sobredosis de vitaminas ocurre cuando una persona ingiere mucho más de la recomendación diaria durante un período prolongado de tiempo.
A pesar de que el cuerpo puede excretar cantidades excesivas de vitaminas hidrosolubles como la vitamina C, también puede retener vitaminas liposolubles como la vitamina A, las cuales pueden resultar tóxicas.
Asimismo, algunas razones por las cuales las vitaminas pueden resultar tóxicas en sobredosis son que la cantidad del principio bioactivo no utilizado se acumule en ciertos tejidos, así como la posibilidad de que el exceso de compuesto bioactivo se metabolice a sustancias tóxicas.
¿Cuáles vitaminas pueden resultar tóxicas si son tomadas en sobredosis?
- Hierro: náuseas, heces con sangre, diarrea, mareos, dolor de cabeza, acumulación de líquido en los pulmones y fiebre.
- Vitamina A: pérdida de cabello, daño hepático, dolores de cabeza severos, dolor de huesos, visión borrosa, piel seca y vómitos.
- Vitamina D: ritmo cardíaco anormal, estreñimiento, micción frecuente, debilidad muscular y confusión.
- Vitamina E: interfiere con la capacidad del cuerpo para coagular la sangre, lo que puede ser dañino para quienes toman medicamentos anticoagulantes.
- Las vitaminas B6: en sobredosis pueden causar daño a los nervios; mientras que B3 puede causar ictericia, niveles elevados de enzimas hepáticas y náuseas.
En caso de que haya decidido comprar vitaminas, siga siempre la dosis diaria recomendada para evitar una sobredosis. Antes de comprar se recomienda consultar a un médico o nutricionista para recibir una valoración.
Antecedente de las enfermedades por falta de vitaminas
El navegante francés Jacques Cartier descubrió en el siglo XVI la primera enfermedad de la que se conoció su dependencia de factores nutricionales, el escorbuto. Cartier reconoció la enfermedad en algunos indígenas en Canadá y en parte de su tripulación.
El médico escocés James Lind publicó años más tarde un tratado sobre el escorbuto y sugirió la ingesta de jugo de lima para su tratamiento. Hoy en día, se sabe que esta patología se debe a la carencia de vitamina C.
Desde aquel entonces, el estudio y análisis de las vitaminas y su importancia para prevenir enfermedades ha sido clave en la investigación biomédica de la nutrición.
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