La Organización Mundial de la Salud informó que el confinamiento tendrá consecuencias graves en la salud mental, provocando aumento de suicidios y trastornos.
En este sentido hizo un llamado a los gobiernos del mundo a no desatender la salud mental de sus pobladores y mencionó que “la situación actual con aislamiento, miedo, incertidumbre y crisis económica, puede causar trastornos psicológicos”.
Dévora Kestel, directora del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la OMS, consideró que esta situación traerá “un aumento a largo plazo del número y problemas de salud mental severos” por factores como el miedo y la crisis economía.
Los grupos de mayor riesgo son los médicos que están en la primera línea de combate al COVID-19, niños, adolescentes, mujeres con riesgo de violencia doméstica y las personas con condiciones mentales preexistentes que han interrumpido su tratamiento debido al confinamiento.
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erv