El estrés o traumas emocionales durante el confinamiento por COVID-19 pueden tener efectos adversos en el crecimiento de los niños, afirmó el especialista en endocrinología pediátrica, Arturo Ayala Estrada.
De ahí la importancia de realizar actividades que les permitan desenvolverse creativamente y que no se vean afectados por el nivel de estrés que viven los adultos, señaló en el marco del Día del Niño, que se conmemora el próximo 30 de abril.
“Durante este periodo, los padres pueden identificar de manera muy sencilla si sus hijos continúan creciendo de manera normal. Basta con observar si utilizan la misma talla de ropa o zapatos, también pueden marcar en alguna pared el crecimiento de los niños semana con semana”.
El experto explicó que la velocidad a la que crecen los niños no es constante a lo largo de la infancia y puede variar, incluso en periodos cortos. Por ello, dijo, es importante saber si el crecimiento durante determinado tiempo es normal o no, debido a que es atribuible a la genética.
Adicional a la herencia genética, la talla de los niños también depende de otros factores como la alimentación, la presencia de alteraciones genéticas, en particular de los déficit hormonales de crecimiento, y de enfermedades durante los periodos del “estirón”.
erv