Hoy se celebra el día Internacional para la Reducción de los Desastres
Desgraciadamente, la toma de conciencia para la mejora de las ciudades, suele ir precedida de alguna crisis.
Cada año, los desastres provocados por riesgos naturales afectan a millones de personas de todo el mundo, los cuales causan pérdidas económicas anuales de entre 250 mil y 300 mil millones de dólares, una cifra que aumentará con la creciente presión ejercida por el cambio climático, la superpoblación y la urbanización.
El Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030, aprobado en Sendai (Japón), se examinan los avances logrados a escala mundial en materia de reducción del riesgo de desastres y se determinan las medidas prioritarias que deben adoptarse.
La Asamblea General de la ONU decidió designar el 13 de octubre como Día Internacional para la Reducción de los Desastres con el propósito de concienciar a los gobiernos y a la opinión pública para que tomen medidas encaminadas a minimizar los riesgos. Asimismo, los desastres, muchos de los cuales se han agravado con el cambio climático, generan un impacto negativo en el desarrollo sostenible y en los resultados deseados.
Como los efectos de los desastres son más devastadores en el ámbito local, los gobiernos municipales y regionales son los que deben trabajar urgentemente en la preparación y respuesta a las catástrofes.
¿Qué es la resiliencia?
El programa de ciudades resilientes de UN-Habitat, define las ciudades resilientes como aquellas que tienen la capacidad de recuperarse rápido de los impactos que sufre el sistema. Esta definición se basa en la concepción de la urbe como un sistema de sistemas, un ente complejo que, a similitud del cuerpo humano, requiere el buen funcionamiento de los distintos órganos para gozar de buena salud.
Las consecuencias de cada crisis dependen de la preparación de la ciudad para hacer frente a determinados impactos esperables y de la manera en que la ciudadanía percibe y reacciona ante ellos.
Desgraciadamente, la toma de conciencia para la mejora de las ciudades, suele ir precedida de alguna crisis
lmo