Restauranteros del Valle de México lanzaron un grito desesperado a través de la plataforma change.org en donde advierten de estar en peligro de desaparecer por las medidas restrictivas que se han implementado por la COVID-19 y ha obligado el cierre de 13,500 establecimientos.
En la petición enfatizan que antes de la COVID-19 el Estado de México se tenían registrados 70 mil restaurantes generando 340 mil empleos directos y al día de hoy han cerrado definitivamente 10 mil locales y se han perdido 50,000 empleos directos.
Los empresarios calculan que la industria genera a nivel nacional 5.6 millones de empleos directos e indirectos y al final de 2020 se habrían perdido 450 mil en el país, más un 10% adicional con el cierre de fin de año.
Recordaron que si bien en la CDMX se está otorgando un apoyo de 2,200 pesos a algunos trabajadores del sector, la mejor manera de ayudarles sería que se garantizaran las condiciones para que mantengan su trabajo con restaurantes abiertos.
Por todo lo anterior les pedimos que la industria restaurantera sea considerada actividad esencial y se nos permita regresar a trabajar. Si algo queda claro es que O ABRIMOS O MORIMOS.
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