Durante una cirugía para extirpar un doble tumor en la médula espinal de un niño de 10 años, los doctores que observaban la actividad cerebral de su paciente detectaron un cambio cuando la música interpretada en un piano junto a él se interrumpió.
Mientras el equipo dirigido por el médico Roberto Trignani realizaba la operación de cuatro horas de duración, el biólogo molecular y músico Emiliano Toso tocaba un piano de cola en el quirófano, a una frecuencia reconocida por tener un efecto terapéutico en el cuerpo.
“Hemos tratado de detener y luego reiniciar la música, notando la respuesta del paciente. A pesar de que estaba bajo anestesia total, el cerebro percibió la música y eso fue muy emocionante”, dijo Toso.
Los médicos dijeron que el paciente estaba bien, pero que debían hacer más pruebas para ver si necesitaba otra operación.
“Todo salió bien, no hubo complicaciones. Hubo una atmósfera mágica de completa armonía”, señaló Trignani, quien lidera la unidad de neurocirugía del hospital Riuniti en Ancona, una ciudad del centro de Italia, según fue citado por la agencia de noticias Ansa.
Anteriormente, Roberto Trignani operó a una mujer de 60 años, quien preparaba aceitunas rellenas mientras era sometida a una operación para extraerle un tumor de su cerebro en el hospital Azienda Ospedali Riuniti de Ancona, en Italia.
El neurocirujano explicó que se pidió a la paciente realizar una actividad mientras era operada para extirparle un tumor de su lóbulo temporal izquierdo, la intervención tuvo una duración de dos horas y media, que involucró a 11 personas.
Asimismo, indicó que este método “nos permite monitorear al paciente mientras trabajamos en sus funciones cerebrales y calibrar nuestra acción”.
La música también estuvo involucrada en febrero de 2019, cuando cirujanos del hospital Kings College NHS Foundation Trust, en Reino Unido, llevaron a cabo una cirugía para extirparle un tumor a Dagmar Turner, una mujer de 53 años, mientras ella tocaba el violín.
La violinista de la Orquesta Sinfónica de la Isla de Wight fue diagnosticada con un tumor cerebral en el lóbulo frontal derecho en 2013, sin embargo, después de años de tratamiento tuvo que someterse a una cirugía craneal.
En un comunicado, el hospital explicó que despertaron a Dagmar a mitad de cirugía para determinar qué áreas se activaban cuando tocaba su instrumento y no dañar las partes del cerebro que le permiten hacer movimientos delicados con sus manos.
Con información de Reuters
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