Donald Trump ya no tiene síntomas de COVID-19 y se encuentra “extremadamente bien”, mencionó su médico Sean P.Conley, luego de que el republicano fuera dado de alta del Hospital Walter Reed para regresar a la Casa Blanca.
A modo de acto triunfal, el mandatario se quitó el cubrebocas al llegar a las puertas de la residencia oficial, donde fue revisado por el médico que reconoció que tras el contagio presentó fiebre y que ahora se encuentra libre de COVID-19.
Al llegar a la Casa Blanca, el mandatario lanzó un tuit en el que mencionó que el virus es “menos letal para la mayoría de habitantes” que la gripa y destacó que asistirá al segundo debate presidencial que se realizará el 15 de octubre en Miami y se transmitirá desde cadenas televisivas estadounidenses.
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erv