Ante el cierre de escuelas por la COVID-19, la Unicef pidió evitar una generación perdida por la COVID-19 y garantizar el aprendizaje, esto después de que la Organización Mundial de la Salud exigió a las autoridades esuropeas no cerrar escuelas.
La Unicef explicó que alrededor de 572 millones de estudiantes han resultado afectados por el cierre de escuelas en 30 países, es decir, 1 de cada 3 estudiantes matriculados en todo el mundo.
Solicitó que se tome en cuenta que todos los niños puedan aprender, incluyendo la reducción de la brecha digital; además de arantizar el acceso a servicios de salud y nutrición, y lograr vacunas asequibles.
En la misma línea la OMS dijo que “debemos garantizar un aprendizaje seguro para nuestros niños y asegurarnos de que disfruten de la temporada festiva . Hemos podido garantizar un aprendizaje seguro para nuestros niños al mantener abiertas la gran mayoría de las escuelas durante casi 100 días consecutivos”
La organización dijo que los niños no se consideran los principales impulsores de la transmisión y, como tal, el cierre de escuelas no se considera una medida eficaz para el control de COVID-19.
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