¿Cinismo, seguridad, burla, o un desequilibrio mental?, qué es lo que Javier Duarte quiere transmitir con su peculiar sonrisa. Tras 73 días preso el exgobernador de Veracruz luce igual que cuando gobernaba Veracruz pero con barba.
Pese al proceso que enfrenta en Guatemala por diversos delitos, Duarte de Ochoa, no ha perdido su característica sonrisa, una mueca enigmática, peculiar y tan llena de lecturas, cabe preguntarnos: ¿De qué se ríe Duarte?
¿Se ríe de los millones de pesos que desfalco al estado de Veracruz?
¿De los niños a los que dio agua como tratamiento?