A fin de enfrentar los delitos de tráfico de drogas, lavado de dinero bajo criterios internacionales, la Procuraduría General de la República y la Fiscalía General de los Estados Unidos, acordaron que la solicitud de extradición del exgobernador Tomás Yarrington sea concedida a la Unión Americana.
Yarrington Ruvalcaba enfrenta acusaciones graves tanto en México como en los Estados Unidos de América, derivadas de hechos delictivos presumiblemente cometidos durante su gestión como gobernador del estado de Tamaulipas, durante el periodo de 1999-2004, en territorio mexicano y en estadounidense.
De acuerdo a las pruebas disponibles y las penas que potencialmente podrían imponérsele, de conformidad con estándares internacionales, se ha llegado al acuerdo entre las autoridades de ambos países, que en términos del artículo 13 del Tratado de Extradición entre México e Italia y XV del convenio en la materia entre Italia y los Estados Unidos de América, se privilegie el trámite de la solicitud de extradición que cumple en la mayor medida con los criterios establecidos por dichos instrumentos internacionales.
“Se considera pertinente solicitar al gobierno de Italia que dé preferencia al requerimiento planteado por los Estados Unidos de América, donde se acusa a Tomás Yarrington de tráfico de drogas y delitos relacionados con lavado de dinero, para que en su momento la autoridad italiana, una vez agotadas las etapas del procedimiento de extradición correspondiente, ordene su entrega a los Estados Unidos de América”, establece un comunicado conjunto entre las dependencias.
De igual manera se acordó que en caso de que el gobierno de Italia conceda la extradición de Yarrington a los Estados Unidos, se autorice en el mismo acto, la extradición temporal a México a fin de que enfrente a la justicia por los delitos que se le imputan, una vez que sea procesado y sentenciado por las autoridades americanas. Lo anterior, de conformidad con los instrumentos internacionales suscritos entre ambos países.
México
- La condena que tendría que cumplir por delitos contra la salud y delincuencia organizada, cometidos entre 1998 y 2015 en Tamaulipas, sería de 20 años de prisión.
Estados Unidos
- Podría enfrentar dos cadenas perpetuas, más 90 años de prisión, por lavado de dinero realizado entre 1998 y 2013 en Texas y Tamaulipas.
lmo