Francia comenzará a levantar las medidas de confinamiento por el COVID-19 a partir del 11 de mayo para evitar un derrumbe económico, dijo este martes el primer ministro, Edouard Philippe.
Advirtió que los casos podrían volver a aumentar si el país retira las medidas con demasiada rapidez. El funcionario detalló que las escuelas se reabrirán gradualmente y las empresas serán libres de reanudar sus operaciones.
No obstante, los restaurantes y cafeterías permanecerán cerrados al menos hasta principios de junio y los deportes profesionales, incluido el fútbol, no volverán a empezar hasta el otoño.
“Debemos proteger al pueblo francés sin paralizar a Francia hasta el punto de que se derrumbe. Demasiada indulgencia y la epidemia vuelve a dispararse. Demasiada prudencia y el país entero se desmorona”, dijo.
Según el ministro, el relajamiento de las restricciones se verá acompañado de un programa de test y aislamiento de los enfermos. “Vamos a tener que aprender a vivir con el virus”, dijo. “Debemos aprender a vivir con el COVID-19 y a protegernos de la enfermedad”.
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pfp