China se protege contra segunda ola de COVID-19

El creciente número de casos de COVID-19 importados en China corre el riesgo de avivar una segunda ola de infecciones en un momento en que “la transmisión doméstica ha sido básicamente detenida”, dijo el domingo un portavoz de la Comisión Nacional de Salud.

“China ya tiene un total acumulado de 693 casos que entraron desde el extranjero, lo que significa que la posibilidad de una nueva oleada de infecciones sigue siendo relativamente grande”, dijo Mi Feng, el portavoz.

En los últimos siete días, China ha registrado 313 casos de Covid-19 importados, pero solo 6 casos confirmados de transmisión doméstica, según los datos de la Comisión.

Hay 45 nuevos casos de COVID-19 registrados en la China el 28 de marzo, por debajo de los 54 del día anterior, y todos menos uno de ellos involucraban a personas que viajaban del extranjero.

La mayoría de esos casos importados incluían a ciudadanos chinos que regresan a casa desde el extranjero.

Se ha ordenado a las aerolíneas que reduzcan drásticamente los vuelos internacionales a partir de este domingo. Y las restricciones a la entrada de extranjeros en el país entraron en vigor el sábado.

Cinco personas más murieron el sábado, todas ellas en Wuhan, la ciudad industrial central donde la epidemia comenzó en diciembre. Pero Wuhan, la capital de la provincia de Hubei, sólo ha informado de un nuevo caso en los últimos 10 días.

Un total de 3 mil 300 personas han muerto en China, con un total de 81 mil 439 infecciones notificadas.

El sábado fue el cuarto día consecutivo en que la provincia de Hubei no registró nuevos casos confirmados. El único caso de COVID-19 de transmisión doméstica se registró en la provincia de Henan, en la frontera con Hubei.

Con el levantamiento de las restricciones de tráfico en la provincia, Wuhan también está reabriendo gradualmente las fronteras y reanudando algunos servicios de transporte local.

Con información de Reuters

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