El Tribunal Supremo español condenó este lunes a nueve líderes separatistas catalanes a penas de entre nueve y 13 años de cárcel por su papel en el fallido intento de independencia de la región en 2017, lo que ha desatado numerosas protestas por toda Cataluña.
Los otros tres acusados en el histórico fallo sobre un referéndum prohibido y una efímera declaración de independencia fueron encontrados culpables solo del delito de desobediencia, por lo cual no fueron sentenciados a prisión.
El expresidente de la Generalitat de Catalunya, Carles Puigdemont, dijo que las penas de prisión eran una “barbaridad”, y el presidente del Parlament de Catalunya, Roger Torrent, las calificó de “ataque a la democracia”.