Elgobierno alemán, encabezado por Angela Merkel, acordó este 18 de septiembre relevar al jefe de espionaje interior, Hans-Georg Maassen, a raíz de las polémicas declaraciones en las que ponía en duda un video de persecuciones de neonazis a extranjeros.
Massen será reubicado en una Secretaría de Estado en el Ministerio del Interior, según han decidido en una reunión en Berlín la canciller y la presidenta de la Unión Cristiana demócrata (CDU), Angela Mekel, el presidente de la bávara Unión Socialcristiana (CSU) y el ministro del interior, Horst Seehoofer y la presidenta del Partido Socialdemócrata (SPD), Andrea Nahles.
Con la destitución de Massen, demandada por los socialistas, Merkel trata de cerrar la crisis suscitada en el seno del Gobierno alemán tras las declaraciones del jefe de los servicios secretos.
Maasen había rechazado que hubiera “pruebas fiables” de que se hubiera producido una “caza de brujas” durante las manifestaciones xenófobas que tuvieron lugar el pasado 28 de agosto en la ciudad de Chemnitz, una declaraciones que contradecían la versión de los hechos sostenida por Merkel.
Lasprotestas se desencadenaron tras la muerte el mes pasado de un ciudadano alemán de origen cubano, de 35 años, supuestamente apuñalado por un sirio y un iraquí, días después fueron puestos en libertad.
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lhp