Débil, triste y baja de peso, así describen los ambientalistas que visitaban constantemente a la elefanta africana Ruperta, en el parque zoológico de Caricuao, en Caracas, Venezuela.
De acuerdo con la ambientalista Maribel García desde el domingo 10 de junio la elefanta se veía en malas condiciones “ya no caminaba igual, la vimos muy desmejorada y muy débil”, dijo. “Nos partió el alma verla en esas condiciones”.
El paquidermo tuvo “tres caídas, principalmente por la desnutrición “, aseguró la ambientalista.
Pero fue hasta este martes 13 de junio cuando se informó que la animal de 48 años murió después de brindar alegrías a los visitantes del parque por más de cuatro décadas con su imponente figura
Otros visitantes consideraron que desde hace dos años era la imagen de los escasez de alimentos y la situación de hambre de miles de personas en el país sudamericano.
En un comunicado, el Instituto Nacional de Parques mencionó que se hicieron todos los esfuerzos posibles para garantizar la vida del ejemplar, la cual incluía la vigilancia médica. Además el Instituto reafirmó el compromiso de mantener a los animales en las mejores condiciones y con las mejores atenciones.
Los activistas del medio ambiente agregaron que habían solicitado su traslado a un santuario de elefantes en Brasil, y advirtieron que lo sucedido con Ruperta puede repetirse con otras especies animales.
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lhp