La cadena estadounidense Sears, que llegó a dominar el sector minorista antes del advenimiento de la venta por internet, se declaró en quiebra este 15 de octubre.
La compañía, de 132 años, presentaba problemas desde hace varios años y estaba sumergida en deudas. La gota que derramó el vaso fue un pago de deuda de 134 millones de dólares que vencía este lunes y que no pudo pagar.
Sears Holdings se amparó en el capítulo 11 de la ley estadounidense de quiebras que permite a las empresas seguir operando y reorganizarse sin la presión de sus acreedores, indicó la empresa en un comunicado.
Edward S. Lampert, presidente de Sears Holdings, indicó que la declaración de insolvencia permitiría a la compañía la “flexibilidad para fortalecer su balance” y acelerar una transformación estratégica.
En los últimos años, la firma cerró cientos de tiendas en medio de reorganización comercial causada en parte por el auge deAmazon y otros actores del comercio electrónico.
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lhp