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Un equipo de científicos de la Universidad Politécnica de Madrid y de la Universidad de Castilla la Mancha, desarrollaron un nuevo proceso para generar biocombustibles a partir de los residuos de la industria del vino.
Este nuevo método involucra ingredientes como aceite de pepita de uva (la cual contiene 7% de aceite y se obtiene tras el prensado de la uva para producir vinos y mostos), y bioetanol, ambas obtenidas durante la producción de vino.
De acuerdo con los investigadores, este biocombustible podría cubrir alrededor de 20 kilotoneladas, lo que es casi el 2 % de biocombustible consumido actualmente en España.
Los expertos señalaron en un comunicado que “el objetivo del estudio no ha sido encontrar la mejor o única fuente de biocombustible, sino incrementar la diversidad de opciones, clave para la sostenibilidad”.
eha