El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unisef) destinará 4.2 millones de dólares para apoyar a niños y adolescentes afectados por los recientes sismos (7 y 19 de septiembre) registrados en el país.
De acuerdo con el representantes del organismo en México, Christian Skoog, la prioridad es que los niños regresen lo más pronto posible a clases.
Cerca de7.1 millones de niños fueron afectados por los terremotos, de los cuales, 2.1 millones se encuentran en zonas vulnerables del país, como Chiapas y Oaxaca; cinco millones se ubican en el centro del país.
Otras de las prioridades es gestionar el trauma y estrés que han vivido los menores. Por ello, la Unicef México indicó que ya se buscan espacios amigables en albergues donde puedan jugar, cantar, bailar, hacer música o crear arte bajo la supervisión de un especialista.
Christian Skoog mencionó que aunque la ayuda la recibirán todos los niños, los esfuerzos se concentrarán en estos momentos en los estados de Oaxaca, Chiapas, Morelos y Puebla.
Por su parte, el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) dijo que los más importante “es vigilar las interpretaciones que ellos hacen respecto a los eventos de emergencia”.
fcj