El Instituto Ruso de Investigación Espacial planea un nuevo programa para explorar Venus, con el envío de al menos tres dispositivos científicos, y sus primeras etapas podrían presentarse el próximo año.
La expedición inicial se denomina ‘Venera-D’, cuyo lanzamiento está programado para fines de la década de 2020. En dos o tres años, es posible el lanzamiento de la segunda y luego la tercera, a mediados de los 2030.
Venus actualmente recibe casi el doble de la radiación solar que la Tiera. Esto pudo haber evaporado la existencia de agua, en caso de que existiera alguna vez, lo que envió el hidrógeno al espacio y atrapo una acumulación de dióxido de carbono en su atmósfera. A su vez, creó un continuo efecto invernadero y desemboco en el alto nivel de toxicidad que hay en su capa de gas.
Con información de Notimex.
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