A sólo diez meses de haber dado a luz a su bebé Alexis Olympia, la tenista estadounidense Serena Williams clasificó a su décima final de Wimbledon, esto tras acabar con la alemana Julia Görges por 6-2 y 6-4.
La menor de las Williams se encuentra a la espera de la teutona Angelique Kerber, quien venció a su vez a la austríaca Jelena Ostapenko por un doble 6-3.
De conseguir el triunfo Serena se alzará con su octava corona en Londres y su título 24 en un Grand Slam con lo que empatará el récord absoluto de más triunfos en un Major que pertenece a la australiana Margaret Court.
Tras su triunfo, Serena dijo que la hazaña le es imposible de creer, pues hace unos meses el embarazo la llevó al descanso absoluto y en la actualidad, apenas con cuatro torneos disputados ya se encuentra en la final de uno de los cuatro torneos más importantes del tenis.
“Es una locura, hubo tras operaciones tras el parto, ni podía caminar hasta el buzón de correos. Y ahora, en mi cuarto torneo de tenis, estoy en la final de Wimbledon”, dijo Serena.
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