La Isla Henderson se encuentra escondida en medio del pacífico Sur, cerca de Nueva Zelanda, la UNESCO la proclamó Patrimonio de la Humanidad, y ha sido visitada por algunos investigadores, pero nunca ha sido habitada por humanos; la isla casi virgen, solo tiene un pequeño detalle: las 17.6 toneladas de basura generada por humanos que se encuentra en su playa, las cuales llegan ahí a través de las corrientes marinas.
Jennifer Lavers, ecotoxicóloga marina de la Universidad de Tasmania, y su equipo encontraron aproximadamente 37, 661, 395 millones de piezas de basura en la isla, plásticos en su mayoría, y a cada metro cuadrado de playa se añaden cerca de 27 piezas nuevas de basura diarios.
De acuerdo a datos en su reporte, la densidad de basura en la Isla Henderson es la mayor cantidad que ha sido reportada en cualquier lado del mundo, aproximadamente el 68% de la basura se encuentra enterrada 10 cm bajo tierra, a la vez, Lavers indica que islas remotas como la Isla Henderson, podrían estar recibiendo grandes cantidades de basura, convirtiéndose así en basureros involuntarios.