Aunque todos lo festejamos, pocos sabemos que la celebración del Día del Niño tiene su origen gracias a la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuyo fin era celebrar los derechos de los niños. Sin embargo, en México se debe a diversos factores.
La Asamblea General de las Naciones Unidas sugirió se instituyera en todos los países un Día Universal del Niño, sin embargo, cada gobierno estatal podría llevar a cabo esta celebración el día que le fuera conveniente. De este modo, la ONU lo celebra de manera oficial el 20 de noviembre, en conmemoración de la aprobación de la Declaración de los Derechos del Niño en 1959 y la Convención sobre los Derechos del Niño en 1989.
En México
La fecha instaurada fue el 30 de abril, según una acta en la notaría pública de Ciudad Victoria, Tamaulipas; expedida el 8 de mayo de 1916. Este día fue seleccionado por el presidente de ese entonces, Álvaro Obregón, tras firmar la Declaración de Ginebra; en la cual se velaba por los derechos y el bienestar de los niños tras la Primera Guerra Mundial.
A pesar del trasfondo de este día, es importante recordar que los niños merecen protección cariño y respeto, con el fin de garantizarles felicidad y bienestar durante su infancia.