La asamblea legislativa de la Ciudad de México avaló reformar laley de Cultura Cívica donde contempla penas que van de tres meses a dos años de prisión para las personas que realicenllamadas falsas a números de emergencia.
Las penas se van a duplicar cuando los “bromistas” realicen llamadas a números de emergencia de instituciones públicas o privadas que presten servicios de vital importancia, por ejemplo protección civil, bomberos y la Cruz Roja.
Entre el 65 y el 80% de las llamadas que se realizan en las instituciones son falsas, lo cual originó que se tomaran estas medidas.
Este tipo de “bromas” hace que haya una movilización de personal y de logística, lo que genera un desperdicio de recursos para la atención de verdaderas emergenciaspara salvar una vida.
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