El robo de piezas arqueológicas afectó la conservación del patrimonio cultural de México

Desde que el nuevo continente fuera descubierto por españoles hace más de 500 años, se llevaron a cabo cientos de robos y saqueos de piezas arqueológicas afectando la conservación del patrimonio cultural mexicano.

En los últimos años se han encontrado en páginas de subastas online, cientos de piezas arqueológicas mexicanas en lista para ser subastadas.

Tras una investigación realizada en 2012 reveló que hay más de 9 mil piezas históricas del país se encuentran en museos extranjeros y peor aún, en colecciones privadas.

Es por esto que a nivel internacional se ha realizado un esfuerzo para regresar a México dichas piezas que, en muchas ocasiones, fueron obsequios realizados tras la conquista, lo cual complica su regreso al país.

Otro obstáculo es el estado físico de dichas piezas históricas, pues algunas tienen tantos años que el simple hecho de trasladarlas de un país a otros podría dañarlas severamente.

Algunas de las piezas más famosas que no han podido regresar al país debido a alguna de estas condicionantes son el penacho de Moctezuma realizado con plumas de quetzal que se exhibe en el Museo de Etnología de Viena.

La serpiente Azteca de dos cabezas es otro ejemplo que se encuentra en el Museo Británico de Londres, donde también se cuenta con la máscara del Dios Quetzalcóatl y Tezcatlipoca, que en vario pueblos era considerado Dios de la oscuridad, convirtiéndose también en la dualidad de la serpiente emplumada.

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erv