Los líderes del G20 se comprometieron a congelar la deuda de los países pobres y a no escatimar esfuerzos para que la vacuna contra la COVID-19 sea asequible y justa para todas las personas de todos los países.
“El brote de la COVID-19 y su impacto sin precedentes en términos de vidas perdidas, medios de vida y economías afectadas, es un impacto sin precedentes que ha revelado vulnerabilidades en nuestra preparación y respuesta y subrayó nuestros desafíos comunes”, dijo el comunicado final del grupo.
Sobre las vacunas, las pruebas y los tratamientos, los líderes aseguraron que no se escatimará en esfuerzos para garantizar su acceso asequible y equitativo para todas las personas.
En el tema de la economía mundial reconocieron se ha recuperado parcialmente gracias a la reapertura gradual de algunos países y sectores, pero fue desigual y altamente incierta.
Sobre la propuesta de México para congelar la deuda de los países pobres, se aprobó un plan para extender los pagos del servicio de la deuda de los países más pobres hasta mediados de 2021 y un enfoque común para abordar los problemas de la deuda más adelante, según el comunicado
Finalmente se reconoció que el cambio climático era un desafío urgente, esto pese a que Donald Trump reiteró su decisión de retirar a Estados Unidos del acuerdo climático de París, la cual entró en vigor el 4 de noviembre.
Con información de Reuters
La noticia continúa, mantenla encendida. Descarga nuestra app