En México 57 millones de personas tienen un producto financiero, es decir, el 68% de la población de 18 a 70 años, según el INEGI, de ahí que este sería el sector que estaría en riesgo si la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determina válido violar el secreto bancario.
¿Qué es el secreto bancario?
De acuerdo a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) el secreto bancario consiste en la protección que los bancos e instituciones financieras deben otorgar sobre los depósitos y captaciones de cualquier naturaleza que reciban de sus clientes.
Se entiende que esta información es parte de la privacidad de los clientes del sistema financiero. Si no existiera esta norma, cualquier persona podría solicitar en un banco, información sobre los movimientos de las cuentas de terceras personas.
El secreto bancario se encuentra regulado en el artículo 117 de la Ley de Instituciones de Crédito, de ahí que ninguna institución bancarias puede información de los depósitos, operaciones o servicios a otra persona que no sea el depositante, deudor, titular, beneficiario, fideicomitente, fideicomisario, comitente o bien representantes legales que tengan poder para disponer de la cuenta o para intervenir en la operación o servicio.
¿Quién puede romper el secreto bancario?
La única excepción a la regla es para la autoridad judicial siempre que exista un juicio, en este caso la autoridad judicial podrá formular su solicitud directamente a la institución de crédito, o a través de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
¿Qué tipo de autoridades pueden romper el secreto bancario?
La PGR
Procuradores regionales
Procurador General de Justicia Militar
Autoridades hacendarias federales, para fines fiscales
La SHCP
La Auditoría Superior de la Federación
La Secretaría de la Función Pública
La Unidad de Fiscalización de los Recursos de los Partidos Políticos del INE
Autoridades electorales de los estados
Con información de la CNBV
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