No importa la ciudad, los baches son una constante en calles y avenidas de la Ciudad de México (CDMX) y en cualquier municipio del país.
Quien maneja un vehículo automotor, tiene que esquivar baches diario y a pesar de eso, hay algunos en los que es inevitable caer.
Por baches pueden llegar como unas 15, 20 llantas reventadas, si no se revienta la llanta se dobla el rin de aluminio y también se tiene que reparar, una reparación de llanta normal, un clavo un tornillo pequeño sale en 80 pesos.
La reparación de un rin puede salir hasta en 600 pesos y la de fierro puede salir en 250 pesos, pero si se daña la suspensión, vea en cuánto le puede salir el chistecito.
Si fuera la rótula que se haya zafado unos 350 pesos dependiendo del carro, la flecha también hay veces que se llega a zafar la rótula, esto podría costar unos 500, el cubrepolvo 200, 250.
Todo esto más la mano de obra que sería de unos 300, 400 pesos y podría llegar a los 2 mil o 3 mil pesos más la grúa si se necesita.
Estos baches no solo golpean a los automóviles sino también le dan un trancazo al bolsillo de los ciudadanos que tienen que absorber el costo del mal estado de las vialidades.
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